El calcio es necesario para la contracción vascular y la vasodilatación, la función muscular, la transmisión nerviosa, la señalización intracelular y la secreción hormonal, aunque se necesita menos del 1% del calcio corporal total para apoyar estas funciones metabólicas críticas.
La vitamina D previene el raquitismo en niños y la osteomalacia en adultos. Junto con el calcio, la vitamina D también ayuda a proteger a los adultos mayores de la osteoporosis.
El magnesio es importante para muchos procesos en el cuerpo, incluida la regulación de la función muscular y nerviosa, los niveles de azúcar en la sangre y la presión arterial y la producción de proteínas, fijación del calcio en los huesos.
El Zinc ayuda a los procesos antioxidantes necesarios para que el calcio y el magnesio sean más efectivos.